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Nuestro ‘know how’

Nuestro ‘know how’ se basa en la riqueza y complementariedad de las experiencias del equipo de Amasisa. El equipo se construye en torno a valores fundamentales y universales: el vínculo con la naturaleza y el medio ambiente, un fuerte compromiso con la sociedad y la voluntad de emprender para dar respuestas concretas a los retos a los que enfrentamos. Trabajamos en estrecha colaboración con muchos actores locales que nos nutren e inspiran con sus experiencias sobre el terreno. También recurrimos a un grupo de investigadores nacionales e internacionales sobre temas relacionados con el desarrollo de sistemas agroecológicos sostenibles y la inclusión social. Actuamos como conductores para la aplicación de soluciones técnicas y colaborativas innovadoras.

Restauración de suelos, biodiversidad y territorios/paisajes

Abordamos cada nuevo proyecto como un conjunto complejo de elementos que forman un agrosistema. Las interacciones entre el subsuelo, el suelo, la fauna y flora, el clima y las comunidades hacen de cada ecosistema un conjunto dinámico que la destrucción/modificación de un solo elemento basta para desequilibrar.
Nuestros proyectos se basan en el desarrollo de sistemas ecológicamente virtuosos, para producir alimentos sanos y al mismo tiempo aumentar la resiliencia de las plantaciones.
Nos basamos en las técnicas y prácticas existentes para desarrollar nuestros propios itinerarios técnicos que tienen como objetivo aumentar la tasa de materia orgánica, promover el retorno de la riqueza floral y faunística, y optimizar el secuestro de carbono, elemento esencial para producir humus.

Inclusión social y compromiso de la sociedad

Desde 2015, Amasisa ha sido reconocida por el Estado como parte de la economía social y solidaria francesa (ESUS). En concreto, Amasisa trabaja en las comunidades rurales para promover el desarrollo sostenible. Tanto en Francia como en Sudamérica, Amasisa sitúa al ser humano en el centro de sus proyectos agroforestales. La política de empleo se basa en la normativa vigente en cada país, con contratos de larga duración en su mayoría, acompañados de una formación y certificación continuas y un apoyo familiar adaptado.
La financiación responsable y participativa es otra especificidad de nuestro enfoque. Cada empresa agrícola que desarrollamos se financia en parte mediante crowdfunding. Más de 1800 inversores individuales son ahora accionistas de al menos uno de nuestros proyectos. De este modo, nuestras empresas están participadas entre un 25% y un 50% por la financiación participativa. El resto de la financiación procede de actores de la financiación solidaria, como el FCP Finance et Solidarité de AMUNDI y, más recientemente, France Active o la Fundación Carasso.
Hemos diseñado y estructurado las empresas agrícolas de manera que sean rentables y, por tanto, proporcionen un punto de apoyo sostenible en las regiones en las que operamos. Esto nos permite pagar a nuestros inversores responsables y reinvertir en las regiones.
La empresa agrícola ciudadana también prefigura uno de los posibles modelos para la necesaria transición agrícola que acelerará la jubilación del 40% de los agricultores activos en los próximos 10 años.

Estructuración de los sectores

Es esencial que nuestros proyectos formen parte de un enfoque en cadena. Al reunir a los actores anteriores y posteriores, es posible crear cadenas de valor sostenibles, desde el productor hasta el consumidor. Esta integración exige el respeto de un pliego de condiciones estricto y, por tanto, una obligación de resultado.

Este enfoque también permite establecer asociaciones a largo plazo entre actores que comparten los mismos valores de sostenibilidad. Es necesario adaptar la temporalidad de nuestros compromisos para permitir un verdadero trabajo de rehabilitación medioambiental.

La comprensión de cada uno de nuestros sectores también nos permite ampliar nuestro papel estructurando, a largo plazo, unidades de primera y segunda transformación, junto con otros agricultores comprometidos. Además de una mejor valorización de nuestros productos (frutas frescas y secas), esto se traducirá en la creación de puestos de trabajo cualificados en las regiones donde estamos implantados.